Publicaciones Científicas. MRC Group. Con el apoyo de la Fundación de Estudios (FESMRC) 04/06/2023 | Departamento Académico y de Investigación Científica Los últimos años han sido de grandes hallazgos en materia de minería en lo que atiende a las necesidades humanas devenidas de ellas, sin ir demasiado lejos, celulares, antenas, televisores, cables, conectores, unidades de computadora, dependen directamente de la minería, una industria altamente contaminante y que cada vez alcanza mayores fronteras. Si bien es cierto que hablar de agotamiento y grandes crisis hace a la necesidad política de control y no a una realidad científica, ya que de ser así nos deberíamos preocupar porque en dos mil quinientos millones de años se destruya la tierra debido al sol y bueno, para qué continuar haciendo, debemos enfocarnos en las certezas que tenemos desde los aspectos regulatorios y técnicos y dejar de lado los comentarios de quienes no tienen capacidad de hacerlo. Es una realidad que no existirán grandes crisis debido a que no sabemos en verdad cuándo o si se agotarán los minerales, solo se nos vuelve más complejo encontrarlos lo cual, de una u otra forma, es muy similar a hablar de agotamiento, si consideramos de base que las tecnologías no se modificarán y que no seremos capaces de seguir hallando lo que llevamos miles de años encontrando. La minería tiene límite, pero también la dependencia de ella, actualmente nos valemos de tecnología conocida altamente dependiente de elementos que tenemos a disposición en mayor o menos medida, pero cuando este ya no exista, deberemos utilizar otros métodos para poder proveernos de soluciones, las cuales, en la actualidad están dando sus primeros pasos. Las tecnologías IR, bluetooth, satelitales, conexión wifi, y sistemas de reconocimiento de dispositivos por proximidad han hecho que haya una reducción importante en el uso de materiales para producir cables, la capacidad de cargar sin cables también, ya que si bien utiliza al momento bovinas y aun así el cable USB es una necesidad, de a poco estas se van dejando de lado. El petróleo tiene su final en los próximos años como combustible, en algún momento verá su final en el mundo, y los productos médicos, especialidades medicinales y químicas que dependen de él, deberán adaptarse a las nuevas disponibilidades. Podemos decir que todas las eras acaban antes que su fundador, así la era de piedra y del carbón acabaron mucho antes de que el carbón y la piedra se extingan, lo mismo ocurrirá con el petróleo y los minerales, o al menos los que actualmente utilizamos en mayor nivel. El Indio, Estaño, Magnesio, Carbono, níquel, son altamente utilizados en tecnología así como el Litio, Cobalto, Fósforo, Galio, Plomo, Arsénico, Antimonio, Tantalio, Cobre, Plata y entre los más extraños, el Gadolinio, Neodimio, Europio, Praseodimio, Disprosio que son de difícil hallazgo y acceso, por lo que su costo y la capacidad de encontrarlos en cantidades suficientes para responder a la demanda de acceso a la tecnología, de continuidad productiva para garantizar el lucro y los puestos de trabajo directos e indirectos, se ve afectada. En los horizontes de la tecnología, el reciclaje no presenta soluciones, puede ayudar, pero realmente las capacidades recuperables no son suficientes para reducir la necesidad de la explotación minera en cuanto al consumo anual, esto es en parte debido a las tecnologías actuales y limitantes vinculadas al reciclaje, así como también el desgaste de los mismos ya que en muchos casos son aleaciones, y los que no, son minerales que requieren miles o millones de años para lograr la consistencia electrofísica que les otorga sus propiedades exclusivas. Debemos considerar además en la misma temática que la necesidad actual de consumo está sesgada por la experiencia humana en el proceso de extracción de cantidades con números imposibles, incluso la profundidad a la que podemos llegar es limitada, y esto se cumple también para factores externos como la minería espacial, que en la actualidad y desde el año 1995 MRC Group International estudia con la finalidad de analizar los aspectos regulatorios y de disponibilidad que al momento las Agencias Espaciales no han podido resolver, y esto es debido a que las consideraciones a futuro exceden las capacidades del pensamiento burocrático y político moderno. Ciertamente se realizan misiones al espacio, la misión Dart, Odyssey, Orbiter, Curiosity, entre otras, que tienen una excelente y envidiable capacidad analítica y por sobre todo de mapeo y reconocimiento, empero, son completamente inútiles para responder al paradigma moderno y a las necesidades actuales, es decir, la realidad es que no podemos entrar en caos simplemente por conocer los hechos, porque los hechos lo eran incluso antes de conocerlos, el mejor ejemplo, es cuando nos preocupamos por las llamaradas solares e invertimos en su estudio, esto es correcto, si lo es, luego de medio siglo de estudio no sabemos cómo evitarlas, ni tampoco que opciones tenemos en caso de que ocurra alguna, no tenemos donde ir ni tampoco acciones preventivas reales debido a que no se ha enfatizado en la ejecución, sino en la investigación. El mundo moderno debe atender tanto a investigar como ejecutar, la una sin la otra carece de sentido. Armando el rompecabezas regulatorio atento a esta publicación, entremos dentro de la incógnita de nuestra ciencia y lo que ella regula, lo que sabe y lo que puede inteligir desde sus representantes, estamos en una estructura mundial que no logra abrirse paso al desarrollo y tipo de desarrollo necesario debido a las limitaciones profesionales, generadas debido a la tecnología que presenta, a su vez, muchísimas limitaciones de las cuales sus propios creadores fueron ignorantes; esto en una visión hacia el futuro nos coloca dentro de una problemática que suma una enorme cantidad de riesgos, por un lado profesionales menos capacitados para hacer frente al problema tecnológico, por el otro, la carencia real de tecnologías o de acceso a ellas, así como también la frontera, poco comprendida por muchos científicos, entre la ciencia ficción y la realidad, si bien podemos obtener minerales del espacio exterior, esto también afectará a nuestro planeta si lo hacemos en marte, júpiter o la luna, considerando que a la Luna hemos llegado escasas veces, a marte aún no, excepto las tecnologías altamente limitadas, y Júpiter como cualquier otro planeta con esa estructura será una idea durante los próximos trescientos años, debemos considerar que estamos ante la imposibilidad de viajar años luz a otro planeta parecido a la tierra con capacidad de albergar vida, imposibilidad de seguir explotando nuestro planeta como lo venimos haciendo y por sobre todo de recuperar lo que ya ha sido explotado, por lo tanto, es necesario comprender que esta crisis pre paradigmática única en la historia, deberá resultar en un nuevo modelo de Profesionales, orientarse hacia los Profesionales Técnicos con alta capacidad de vencer las limitaciones que la tecnología impone a fin de volver al uso del cerebro para lograr una solución a preguntas que en un futuro no muy lejano, no más allá de los cien años, serán asuntos de interés nacional para cada país y de emergencia global para el mundo. Cien años, no es tan lejano, si pensamos que muchos de nosotros hoy tenemos abuelos mayores a ochenta años; lo que ocurra en este futuro tan cercano nos afectará a todos, y la solución está en reestructurar, y una de las principales que debemos analizar es el reemplazo de los materiales de minería menos disponibles por los que estén mayormente a nuestro alcance, ejecutar acciones espaciales para obtener, en forma segura y bioecológica, minerales de los cuerpos celestes (Proyecto Satellyte Landing Comm MRC Group) y re pensar la estructura de nuestra tecnología a aquella que depende cada vez en menor cantidad del uso de minería y grandes cantidades de recursos de difícil renovación, así como también, considerar que capacidad tenemos de obtener nuevamente recursos que están ampliamente disponibles, el Hidrógeno, nuestra nueva energía del futuro, es un ejemplo de esta limitación, porque excepto que lo busquemos directamente de las estrellas y hagamos concentración del mismo a nivel exoplanetario, las fuentes actuales son el agua, los combustibles fósiles y por electrólisis, o termólisis o químicamente a través de algas, las cuales requieren de fósforo, carbono, oxígeno, y otros nutrientes para vivir. La nueva energía requiere utilizar el agua, cuántos años pasarán hasta que comencemos a notar la reducción de los niveles oceánicos. Prof. Lic. Maximiliano Racciatti Director del Dpto. de Investigación Espacial MRC Intl. Esp. en Asuntos Regulatorios e Inteligencia Regulatoria Esp. Recursos Medioambientales y Aeronáuticos Dirección de Ciencia e Investigación de MRC Group Argentina Dirección de Docencia e Investigación, Fundación de Estudios Superiores Multidisciplinarios en Regulación y Ciencias (FESMRC) www.fesmrc.org.ar Referencia (formato básico): 1. Mine contamination as of november 2016: https://reliefweb.int/map/world/mine-contamination-november-2016 2. Mine contamination images: https://www.google.com/search?q=MINE+CONTAMINATION&tbm=isch&ved=2ahUKEwiL26LC6qv_AhVal5UCHdEiAiEQ2-cCegQIABAA&oq=MINE+CONTAMINATION&gs_lcp=CgNpbWcQAzIHCAAQExCABDoFCAAQgAQ6CAgAEIAEELEDOgsIABCABBCxAxCDAToHCAAQigUQQzoICAAQsQMQgwE6BAgAEB46CAgAEAUQHhATOggIABAIEB4QE1DgCViAGmCXG2gBcAB4AIABXogBtQuSAQIyMJgBAKABAaoBC2d3cy13aXotaW1nwAEB&sclient=img&ei=86x9ZMuVJ9qu1sQP0cWIiAI&bih=763&biw=1536#imgrc=OXemEbqi88zXCM